Desafío
La ciudad de Beaumont, California, tenía problemas constantes en la planta de tratamiento de aguas residuales porque el equipo instalado anteriormente tenía fallas y, por lo tanto, les impedía alcanzar los objetivos de cumplimiento que exigía el permiso.
Los jefes de planta y las autoridades municipales se contactaron con Veolia y nos pidieron una recomendación para resolver estos problemas y lograr que las instalaciones se ajustaran a la normativa lo antes posible.
La planta estaba diseñada para procesar 4 MGD; sin embargo, los cuatro trenes de tratamiento tenían problemas operativos en forma reiterada.
El cliente necesitaba una solución y un plan de expansión que le permitiera cumplir sus estrictos requisitos en cuanto a calidad del agua; quería que el equipo fuera proporcionado por una compañía en la que pudiera confiar, y prefería un proveedor que pudiera brindar un servicio extendido para su operación.
Solución
La ciudad evaluó diversas opciones para la planta y finalmente contrató a Veolia para instalar 2 trenes nuevos y readaptar los 4 trenes existentes.
Esta solución era la alternativa de menor riesgo, ya que ofrecía la mayor capacidad de filtración durante la construcción y permitía seguir cumpliendo con los objetivos de capacidad durante esta etapa.
Con el objetivo de maximizar la capacidad y reducir el riesgo a lo largo de la readaptación, la actualización del sistema de filtración de membrana se implementó en tres fases:
En la fase 1, Veolia llenó por completo los 2 tanques de membrana vacíos, con 5 cartuchos en cada uno. Además, se instalaron instrumentos, colectores de aire y permeado, bombas de permeado y controles para los dos trenes nuevos.
En la fase 2, se instalaron los trenes llenos, con 5 cartuchos cada uno, además de colectores de aire y permeado nuevos y eyectores de aire nuevos en los trenes.
En la fase 3, Veolia pasó 1 cartucho lleno de 4 trenes a los últimos 2 trenes y les agregó 2 cartuchos a cada uno, y además se instalaron nuevos colectores de aire y permeado, y eyectores nuevos.
En diciembre de 2021 se dio la orden oficial y las tareas iniciales comenzaron a principios de 2022, en tanto que los equipos y las membranas llegaron al lugar en abril.
El proyecto se dividió en tres fases de construcción, cada una de ellas de seis semanas de duración aproximada.
Resultado
En octubre de 2022, la planta ya estaba en pleno funcionamiento, y el cliente podía llevar a cabo los procesos finales ajustándose a las pautas de cumplimiento exigidas por su permiso. Además, Veolia podría ampliar las operaciones a 8 MGD en el futuro con solo agregar membranas a los trenes existentes.
El desafío que enfrentaba el cliente solo podía ser superado por un socio que tuviera amplia experiencia en este tipo de soluciones y que pudiera gestionar el proyecto y llevar a cabo la instalación y las pruebas con rapidez.